Una buena limpieza y mantenimiento de nuestro jardín es muy importante para protegerlo de plagas y de especies invasoras que pueden matar nuestras plantas. Con este proceso también evitaremos que las malas hierbas puedan crecer de manera desordenada haciendo que el jardín pueda ser un foco de incendios
Los Centros de Jardinería y otras Grandes Superficies especializadas en estas tareas suelen comercializar sacos de plástico para desbrozar y limpiar jardines y eliminar cómodamente los residuos orgánicos.
En Jaymafer fabricamos estas bolsas con materiales reciclados haciendo más sostenible este proceso, podemos personalizarlas con su logotipo o marca y también realizarlas en colores distintos para distinguir así el residuo interior, en función de si vamos a retirar hojas, ramas u otros restos más pesados podemos elegir el tamaño y el grosor de las bolsas.
Es importante que depositemos estos restos en el contenedor marrón y siempre dentro de una bolsa para evitar la generación de malos olores y evitar la suciedad en la zona
Al ser residuos orgánicos pueden, mediante un proceso de compostaje, convertirse algún día en fertilizante y regresar de esta manera al jardín de donde salieron
El compost es un abono natural formado por la mezcla de residuos orgánicos fermentados y materias minerales. El compost existe desde el nacimiento de las plantas verdes en la tierra. Cualquier vegetal que acabe en el suelo y se pudra con participación de oxígeno se transforma en compost. Sin embargo, el que no tiene la ayuda del oxígeno, se convierte en turba (carbón ligero de aspecto terroso y esponjoso) y finalmente en carbón por el efecto de la presión.
Se dice que el primer compost realizado por el ser humano y no por la naturaleza fue Sir Albert Howard, que preparaba su compost con una capa de material vegetal de 15 centímetros.
Apostemos por la economía circular
#aprendamosausarelplastico